Capitulo 5
1:00 p.m. Posted In Capitulo 5-Mama ¿Por qué hay alguien sentada en mi lugar? – dice serio
-Tom, ¿Qué te he dicho acerca de los modales?- dice su madre a modo de reproche
-Tom, ella es Leila, ayer se mudo a la casa de enfrente- dice Bill sonriéndome
-Oh, hola Leila-dice Tom. Para luego sentarse frente a mí.
Simone trae un plato lleno de spaguetti, otro con ensalada y una jarra con limonada. Luego trae platos, cubiertos, vasos y aderezos para la ensalada. Bill y Tom literalmente se lanzaron hacia el spaguetti tirando un poco haciendo que me cayera justo en la punta de la nariz.
-Jajajajaajajjajajaajjajaa-risas por parte de todos excepto Simone.
-Chicos, quietos, ya comieron suficiente spaguetti y ni Leila y yo lo hemos probado asi que dedíquense a comer ensalada ahora.
-Pero mamá- se quejaban ambos.
-Nada de peros señoritos.
-Hay mama, es como comer pasto- reproche de parte de Tom.
-Y solo las vacas comen pasto, y hasta donde yo se no somos vacas- reproche de parte de Bill.
-Y que ¿Acaso Leila es una vaca? Porque ella esta comiendo ensalada- decia Simone.
-No, pero …
-Nada de peros Bill, anda come un poco de tu PASTO- decia Simone.
-Jjajajajaja- me empese a reir de su mini discusión en voz baja. Bill fue el único que lo noto.
Tímidamente Tomo un poco de spaguetti y lo pongo en plato y lentamente como, esta rico.
Cuando ya todos terminamos de comer, Simone recogió los platos y luego nos entrego un plato con nieve de vainilla y jarabe de chocolate encima a cada uno.
-Oye Leila, ¿Y que haces tu para divertirte?- me pregunta Tom
-Pues me gusta mucho leer, mirar las estrellas, ver películas de suspenso o terror y cosa así.
-¿Acaso no te gusta salir con tus amigos?- me pregunta Bill ahora
-Yo, ehm, se podría decir que donde yo antes vivía no tenía muchos amigos.
-Oh, pues no te preocupes porque aquí tendras y hasta de sobra.
-Claro que tendras amigos Leila, te juntaras con nosotros de ahora en adelante, y no acepto un no por respuesta- dice Tom
Yo solo me limite a asentir con la cabeza 2 veces a modo afirmativo con una sonrisa.
Luego pasamos a la sala y ahí seguimos hablando hasta que Dylan me habla que ya están en casa y que papa quería saber donde estaba y que volviera lo más pronto posible.
-Chicos ya me tengo que ir, parece que ya llegaron mis padres.
-Adiós Leila- digoron al unísono
Me despido de ellos con un leve beso en la mejilla y Bill se ofrece a acompañarme a casa, no quiere que cruze la calle sola.
-Vamos Leila, no vaya a ser que un borracho loco te arroye o un mapache rabioso te haga su presa o algo peor.
-¿¡HAY MAPACHES RABIOSOS AQUÍ!?
-Pues no he visto ninguno, pero no vaya a hacerla de malas.
-Bill porfavor, puedo cruzar la calle sin que nada malo me pase.
Justo cuando puse un pie en la calle pasa un auto a toda velocidad haciendo rechinar sus llantas.
-¡VES LEILA! Ahí pudiste estar tu.
-No, porque ya hubiera estado dentro de mi casa.
-Pero Leila…
-Nada de peros Bill.
-Leila, me reúso a dejarte ir sola a tu casa, eso no es de caballeros- decia poniéndose de puntas e inflando su pecho con la mirada al cielo
-Jajajajajjajaja esta bien, pero no hagas nada raro si mi madre abre la puerta.
-Ok.
Y así fuimos a la casa sin encontrar ningún mapache rabioso en el camino, y pues ya nos habíamos encontrado a un borracho o loco con exceso de velocidad.
-Bueno, muchísimas gracias noble caballero por traerme sana y salva a mi noble morada- digo haciendo muchos ademanes con las manos.
-No hay problema mi lady, yo sere su noble caballero que la escoltara a cualquier lugar protegiéndola de mapaches rabiosos y otras cosas que puedan dañarla- dice también con ademanes.
-Oh, que amable de su parte mi buen caballero, le ruego que conserve esta prenda mia en honor a mi recuerdo- digo entregándole el corazón de la manzana que comí camino a su casa.
-Que honor me a dado usted, prometo guardar esta bellísima prenda con sumo cuidado y…
Ring.Ring.Ring.
-Papa?
-Si, ya estoy afuera.
-No
-No, me paso nada.
-Mira abre la puerta y ahí me veras.
-Hija pasa, oh mira, ¿No es tu amigo el del centro comercial?- dice dedicándole una sonrisa a Bill
-Si papa, vive justo enfrente de nosotros.
-Mucho gusto Bill, mi nombre es Charles y para cualquier cosa que necesiten estamos con las puertas abiertas- decia estrechándole la mano a Bill
-Igualmente señor, y si me disculpa, creo que ya es un poco tarde, debo retirarme- dice Bill para luego partir hacia su casa.
Entramos a la casa y yo rápidamente subo a mi habitación, me quito el calzado y me tiro en la cama.
Toc.Toc.Toc.
-Esta abierto.
-Hija, quería hablar contigo sobre algo- dice mi padre.